15 MINUTOS CON RIGOBERTO URÁN.

En días pasados, a su regreso de la primera concentración con el equipo del cual es capo, el belga Omega Pharma - Quick Step, pudimos hablar con Rigoberto Urán. Fue una charla absolutamente informal y muy agradable. Por eso, aunque corta, queremos compartirles lo más relevante. Semejante regalo de navidad no habría sido posible sin la ayuda de Luis Barbosa (lo pueden seguir en twitter.). A él, nuestra gratitud infinita.

Rigoberto Urán en los colores del Team Sky. foto: Romina Mooren.

Rigoberto Urán es un activo que ha ido al alza desde el verano de 2012 cuando, casi sin proponérselo, cruzó la línea de meta en Londres detrás de un astuto Alexandre Vinokourov, para adjudicarse el segundo cajón del podio en la prueba de ruta de los Juegos Olímpicos. Después vendría ese mayo glorioso en el que 14 escarabajos colombianos revivieron los mejores años del ciclismo colombiano, en un Giro d'Italia que pasará a la historia. Urán debió asumir, tras el retiro de Sir Bradley Wiggins, para el momento campeón del Tour de France, el liderazgo de su equipo, el bitánico Sky. Y lo hizo con tal categoría, que consiguió ubicarse, de nuevo, en el segundo puesto de la clasificación. Fue el único pedalista que pudo seguir la rueda de Vincenzo Nibali.

Urán, vencedor de etapa en el Altopiano del Montasio. Giro d'Italia 2013.

Vendrían los rumores de su paso a un nuevo equipo. La posibilidad de ser el Capo Squadra de una de las mejores plantillas del ProTour. Una Vuelta España en la que rodó prácticamente en solitario, y aún así consiguió ser protagonista. Al punto de perder una etapa apenas por la "piel de sus dientes". Y el catastrófico pero heroico Mundial de Toscana, en el que vio frustradas sus aspiraciones al podio (esta vez sí planeado, buscado, preparado y hasta anticipado) por culpa de una aparatosa caída que nos dejó a todos con el alma en pedazos, y seguramente varios años menos de vida. El tiempo y los cardiólogos están llamados a probar esa teoría.

El uniforme nacional de Colombia, que llevaba Urán durante el Mundial de Toscana 2013.

Ahora, cuando el 2013 ve sus últimas horas, Rigoberto ya ha pasado sus primeras semanas en California, en las impresionantes instalaciones de Specialized, el alma detrás del Omega Pharma. Y se probó en Valencia, en pista y en ruta, con los que serán sus escuderos a partir del primero de enero de 2014.

Al regreso de ese primer reconocimiento de sus tropas, fue cuando pudimos cruzarnos con Urán. En medio de las múltiples entrevistas y las notorias ansias de volver a su Antioquia natal.


Rigoberto, es un placer para La Cadenilla poder finalmente conocerlo. Ha sido un gran año para usted y eso lo hace un gran año para los aficionados al ciclismo. ¿Qué viene en los próximos meses para usted? 

De momento acabo de llegar en la primera concentración en Valencia. Satisfecho con lo que sucedió. Es un buen grupo de trabajo. Estuve 10 días allá trabajando. También se trabajó con Specialized, para mejorar un poco la posición, y se ha estado avanzando bastante en ese tema. Se habló también del calendario. Sé que inicio ahora en Mallorca. Después Omán, Strada Bianca, Tirreno [Adriatico], y ahí ya miraremos.  Como vaya en esos días, se define bien si estaremos en el Giro, o no. Entonces, primero es hacer esas carreras, y ya miraremos dónde vamos a estar.

¿Entonces ni el Tour, ni el Giro están fijos?

¡No! No, no, no. La idea es ver en esas carreras cómo está el equipo, y ahí sí calibrar.

¿Cómo se acopló con el Omega?

Mejor de lo que esperaba. Yo fui allá, y parecía como si ya hiciera parte del equipo. Y bueno, se trabajó bien, contento. Al fin y al cabo son equipos de gente muy profesional y cada uno sabe cuál es su papel. Entonces, contento con eso.

En el Sky ya había tenido la oportunidad de conocer a Mark Cavendish. Pero, a los demás, ¿los conocía de antes?

He tenido la oportunidad de competir con bastantes. Con Cavendish ya había estado. He estado con algunos otros corredores. Los conozco bastante. Y en carrera pues he estado con todos ellos. A algunos directores los conozco también bien. Al equipo de trabajo, al staff, les conozco también.

Mark "Manxman" Cavendish. "El Misil".

Ya que de alguna manera ha tenido la oportunidad de conocer por dentro a los dos equipos, ¿se alcanzan a notar las diferencias? 

Yo he dicho, digamos, en esos equipos grandes, del World Tour, todos más o menos, manejan el mismo perfil. Son mentalidades diferentes. Los ingleses tienen una forma de trabajar, y los belgas tienen otra forma de trabajar. Son dos cosas muy diferentes. De lo táctico no se todavía, porque pues no he estado en ninguna carrera. Pero ahora que estuvimos entrenando, son muy parecidos. En términos de logística es la misma cosa.

¿O sea que ese tema, tan famoso, de las "ganancias marginales" del Sky, eso se ve en todos los equipos? 

Este equipo también le apuesta mucho a eso. Tiene detrás a la marca specialized, una marca que le apuesta mucho. Yo ya estuve dos días en Morgan Hill, California [sede de la fabricante norteamericana], ahorita estuve en el velódromo de Valencia, y todo pues perfilando y trabajando para mejorar el otro año en la contra-reloj. ¡A ver si no perdemos tanto! -Rigoberto estalla en una carcajada.-

Rigoberto Urán preparando una crono.

¿Podemos hablar de las bicicletas? ¿Se ha sentido cómodo con la Specialized? ¿Cuál le dieron? 

Bueno, me dieron la Tarmac. Está claro, hay que decirlo: siete años con Pinarello. Es toda una vida con Pinarello, y ya estaba muy acostumbrado. De momento, estoy contento. Digamos que también es un proceso.

Specialized Tarmac. Team Issued. Omega Pharma - Quick Step.

Hablemos ahora del Giro. Del Giro d'Italia 2013. ¿Se pudo dar cuenta, estando allá, de ese renovado interés sobre el ciclismo, ese nuevo capítulo que se abrió, con la actuación de ustedes allá en Italia?

Yo, digamos que me enteraba por los mensajes que me llegaban. Se estaba haciendo un papel muy bueno. Los mensajes que me llegaban todos los días eran algo muy bonito, muy bacano, entonces era algo muy bueno. Pero, uno no se alcanza a imaginar lo que se estaba viviendo acá en Colombia, porque uno estaba allá concentrado.

Y ustedes, por la calle, en su vida diaria, ¿empezaron a sentir más el interés de la gente?

Está claro. Lo que ha vivido Colombia, ciclísticamente, en estos últimos dos o tres años, ha sido mucho. Ha mejorado mucho el ciclismo. Colombia es un país que siempre le ha gustado mucho el ciclismo, porque tuvimos épocas doradas con Lucho, Fabio y esta gente. Pero, se habían dormido. O sea, la gente ya se le había olvidado el ciclismo, se le había olvidado las carreras. Y ya, otra vez, la gente está volviendo a despertar. Acá hay mucho ciclismo.

Ahora la gente te reconoce, te da voz de aliento cuando estás entrenando, te pitan. Entonces ha vuelto a despertar eso.

Aquí en Colombia tenemos una geografía muy buena para entrenar. Tenemos montañas, altura... Entonces Colombia ha sido un país de buenos ciclistas, de escaladores, el "escarabajo", entonces se ha vuelto a despertar. Tuvimos una época muy buena con Santiago [Botero] y tal, pero ya después se perdió mucho.

Lo que sucedió este año en el Giro, que éramos 14, volvió a despertar eso otra vez.

Es muy bonito. Es muy bonito que te reconozcan, que te piten. Es muy bonito que te pite un carro... ¡así sea para que dejes de estorbar! -De nuevo Urán muestra la inmensa sonrisa por la cual lo comparan con Mick Jagger.-

El haber quedado segundo en el Giro, sabiendo que Italia es un país muy importante para Rigoberto Urán. ¿Fue un poco más significativo que haya sido el Giro el primer podio en una de las tres grandes? 

¡Sí! Mucho, mucho. Porque yo tengo muy buena relación con Italia. Tengo una familia allá, pues. Una familia que me adoptó. Algo muy bonito. Aparte de eso, tengo una cantidad de amigos, un grupo de fans, como un clan, que van a las carreras y me acompañan. Entonces es muy bonito.

Estar en el podio en Brescia, la ciudad donde he vivido, y donde a veces voy a entrenar, y donde voy a visitar a mi familia, verlos desde el podio fue algo muy bonito.

Urán en el podio final del Giro d'Italia 2013.  Foto: Bettini. 

Y, más allá del interés del público, ¿cómo ve Rigoberto los próximos cinco o siete años del ciclismo escarabajo?

Yo lo veo muy bien. Yo lo he dicho: tenemos más o menos cinco años de buen ciclismo, con los corredores que tenemos ahora, ¿cierto? Sergio Luis [Henao], [Nairo] Quintana, [Carlos] Betancourt, el Team Colombia; más los que vienen. Entonces, yo creo que tenemos, de momento, un buen grupo para trabajar.

¿Qué se puede lograr? No se. Este año se hizo segundo en el Giro, se hizo segundo en el Tour.

 Pero eso no quiere decir que en el 2014 vamos a ganar estas carreras. Son cosas muy diferentes. Cambia mucho, porque, digamos este año este año, lo que me pasó a mi en el Giro, que yo no iba de jefe, yo iba solamente a ayudar al equipo, y ya cambió todo en carrera. Ya es difícil el próximo año, cuando desde el primer día ya vaya como líder principal a una carrera. Ya seguramente cambiará todo. Entonces, espero poder estar adelante y poder hacerlo bien.

Y, desde el lado europeo, ¿Ha cambiado la relación de los técnicos, de los aficionados, de los ciclistas europeos hacia los escarabajos? 

Ahora los colombianos son buscados en Europa. Los equipos quieren corredores jóvenes colombianos. Cuando un equipo europeo tiene un ciclista colombiano, sabe que tiene un buen escalador, un buen ciclista.



Sabíamos que nuestro tiempo con Rigoberto Urán sería corto. Mientras charlábamos con él, otros medios de comunicación llegaron para entrevistarlo. Sin embargo quedamos felices de haber cruzado algunas palabras, y con el compromiso de extendernos en la conversación, antes de terminar su periodo de descanso en Antioquia.




A ustedes, lectores, los invitamos a estar pendientes de la continuación de esta entrevista. Consideren esto un abrebocas de lo que tendremos para ustedes en próximos días. Por ahora, disfruten recordando esos últimos kilómetros de la décima etapa del Giro d'Italia 2013. Con el 1-2 de los Escarabajos, Uran y Betancourt.